- En su exposición titulada “Cómo viene la recuperación”, el expresidente del Banco Central analizó el progreso del Covid-19 y su efecto en la economía a nivel global y local, y dio luces de lo que se puede esperar para los próximos meses en nuestro país.
El destacado economista Vittorio Corbo, en el marco del XII seminario de SURA Inversiones para sus clientes, analizó los avances y contención de la pandemia, sus efectos, y también las medidas que se han implementado para apoyar la economía en el contexto de la crisis sanitaria.
En primer lugar, se refirió a la reactivación de la actividad económica en los países donde se han empezado a levantar las medidas restrictivas. Sin embargo, sostuvo que la gran preocupación hoy es la velocidad de expansión de contagios en Estados Unidos, que tiene impacto directo en su recuperación económica y en la recuperación mundial, ya que en ese país “las cifras parciales muestran que la recuperación de la actividad y el empleo están perdiendo fuerza”. Situación que contrasta con lo que se ve en Europa, donde el programa de reactivación y el gran estímulo fiscal de Alemania y la creación del Fondo Europeo de ayuda se traducen en avances positivos tanto para Europa como para el mundo.
Con todo, sostuvo que el nivel de incertidumbre global sigue siendo alto, y las perspectivas económicas siguen estando sujetas a la evolución del Covid-19, señalando que “el primer trimestre del 2020 la economía global se contrajo un 13% anualizado y en el segundo trimestre estima que se habría contraído un 18%. “Como resultado, el PIB mundial del segundo trimestre estaría cerca de un 10% por debajo del PIB de finales del 2019”, comentó Corbo, quien señaló que de acuerdo a las proyecciones se esperan caídas de 4,9 a 7,6% en el PIB mundial para este año.
Para China, que está más avanzada en la recuperación, se proyecta un crecimiento en el rango de –2,6 a +2,5%, representando su peor tasa de crecimiento desde los años 70, aunque destacó que la buena noticia es que el sector industrial se está recuperando más rápido de lo esperado y el sector servicios avanza en su recuperación. Según el economista, sin duda el sector más afectado será América Latina, que sufrirá una caída del PIB entre 7,2 y 9,4%, enfrentando su peor crisis en un siglo.
En cuanto a un escenario de recuperación para 2021, en el ámbito de las inversiones Corbo destacó que las principales oportunidades se encuentran en Europa, debido al boost que van a generar los recursos liberados por Alemania. También ve con buenos ojos a los países de Asia que han sido capaces de enfrentar bien la pandemia, como Corea, e insiste en que Estados Unidos es una economía lo suficientemente fuerte, flexible y competitiva, que va a salir adelante a pesar del momento actual, por lo que seguirá siendo una alternativa de inversión. Con todo, después del rebote inicial, debido a las cicatrices que va a dejar esta crisis, la recuperación va a ser lenta en todos los países avanzados y en la economía global.
El caso de Chile
Los efectos de la pandemia en el mercado laboral han sido devastadores, con una tasa de desempleo que alcanzó un 11,2% a finales de mayo y un colapso que se refleja en que desde mayo de 2019 se han perdido 1.491.900 empleos y se retiraron del mercado laboral 1.353.000 personas. “La recuperación del empleo va a ser un proceso muy largo y doloroso y va a requerir de importante apoyo de políticas públicas. Y eso es lo que está en el programa de reactivación que fue parte del acuerdo nacional”, comentó.
El economista destacó el esfuerzo fiscal realizado hasta el momento, en particular el acuerdo entre el gobierno y la Comisión de Hacienda del Senado ampliada de mediados de junio, que incluyó un programa adicional de hasta US$12.000 millones para mitigación y reactivación. En esa línea, hizo hincapié en que los esfuerzos fiscales sobre la línea (como aumentos de gastos o reducción de impuestos) en Chile son del 7,7% del PIB, mayor a lo que han hecho países como el Reino Unido, Canadá, Suecia, China, y muchos otros. “En Chile tuvimos la capacidad porque nos comportamos bien en cuanto a la solvencia fiscal, y también gracias al apoyo del Banco Central que en los últimos 30 años ha ganado gran credibilidad y se ha manejado bien en las crisis”, remarcó.
En cuanto a perspectivas de crecimiento, afirmó que la recuperación de mediano plazo va a depender del escenario externo y de la recuperación de la inversión. “En esto la institucionalidad y el respeto de los contratos es fundamental para crear un marco favorable para la inversión tanto nacional como extranjera”, y destacó que “esto aumenta la urgencia de asegurar el acceso de nuestras exportaciones a los principales mercados y avanzar en la aprobación del TPP-11”.
Respecto al futuro, estimó que “con la incertidumbre reinante, es difícil hacer proyecciones, pero con una reapertura gradual en curso, de ser exitosa, la recuperación comenzaría en agosto/septiembre, más cercano a septiembre”. Finalmente, el economista sostuvo que hoy tiene tres principales preocupaciones para Chile: el deterioro de la convivencia política; el aumento de políticas diseñadas por las encuestas más que por el análisis técnico y los acuerdos políticos, y las condiciones del vecindario. “Tendremos un vecindario muy complicado debido a las situaciones críticas de los principales países como Brasil, México, Argentina y Perú, y nos pueden empezar a ver parecido al vecindario, y eso es un riesgo”, sentenció.